En la
actualidad la mayoría de los equipos de aire acondicionado que se instalan
llevan una unidad exterior que debe instalarse, siguiendo ciertos criterios.
La unidad
exterior, como su nombre indica, debe instalarse en el exterior de la vivienda.
La unidad
exterior debe colocarse en un lugar accesible para en caso de reparación un técnico
pueda acceder a manipularlo con seguridad.
A la hora de
elegir el sitio donde colocar la unidad exterior debe tener en cuenta el peso
de esta unidad, que puede rondar desde los 30 kilogramos hasta los 80 o más en
algunos casos, por lo general no pueden ser manipulados por una sola persona,
por lo que colocarlo al lado de una ventana puede ser peligroso, obligando a
uno de los técnicos a descolgarse desde la azotea, y no todos los técnicos están
dispuestos a correr estos riesgos para colocar una unidad, además colocar la
unidad en un lugar de difícil acceso puede encarecer el precio de futuras reparaciones
pues obliga a trabajar al técnico en situaciones de riesgo y en posiciones en
las que una acción simple como medir el gas puede parecer una autentica proeza.
Nuestra recomendación
es que cuando vaya a instalar un equipo nuevo consulte a una empresa de Reparación Aire Acondicionado para que le aconseje
el lugar más adecuado para colocar su unidad, para poder sustituirla en el
futuro o para poder acceder en caso de reparación.
También ha
de tener en cuenta la recogida de agua, el equipo de aire acondicionado expulsa
agua por la condensación del aire, esta agua no debe ser arrojada a la calle en
un continuo goteo que tanto molesta a los peatones, debe recogerla y aprovecharla
aunque sea para fregar, lavar o regar las plantas. Esta agua producto de la condensación
se considera destilada, por lo que es apta hasta para el consumo, aunque no es
lo recomendable.